Áreas de intervención

Las razones para acudir a terapia son tan distintas como somos las personas. Puede que no tengas un problema definido, pero sientes que algo no va bien y tienes una necesidad interna de avanzar.

Quizás estás pasando por alguna situación que te provoca malestar y te influye en tu estado de ánimo, tu vida diaria, en tus relaciones. A veces nos sentimos abrumados o sin recursos para hacer frente a los cambios.

En todas estas circunstancias la terapia puede ayudarte, es un acto de valentía y autocuidado.

Puedo ayudarte en...

Terapia individual para adultos

Terapia de pareja

Duelo

Por una pérdida significativa, como la muerte de un ser querido, un trabajo, un proceso de separación o divorcio, una relación importante o cualquier otro evento que genere un profundo sentimiento de pérdida.

Cambios en el estado de ánimo

Ansiedad, tristeza, inestabilidad emocional que afectan el estado de ánimo y tu capacidad para funcionar en la vida diaria.

Reacciones desadaptativas

Dificultades para enfrentarse a los cambios, crisis vitales, trauma, estrés o fatiga mantenida.

Dificultades de relación

Ya sea con la pareja, con la familia o de tipo social: dificultades en la comunicación, gestión de conflictos, desconfianza, infidelidad, falta de confianza para relacionarse, etc.

Terapia sexual

Nuestra experiencia vital influye también en cómo nos vivimos y en nuestra sexualidad. Podemos ayudarte con las dificultades en el deseo, anorgasmia, insatisfacción con el tiempo de eyaculación, disfunción eréctil, vaginismo, dolor en las relaciones, etc.

Autoconocimiento y crecimiento personal

La terapia también puede ser valiosa para quienes desean explorar más profundamente su identidad, sus valores y su desarrollo personal, incluso si no experimentan un malestar significativo.